martes, 15 de marzo de 2011

(Con)fusión

Se acabó. Cualquier debate sereno sobre la energía nuclear va a resultar imposible durante las próximas décadas. Otra vez. De nada servirá que las centrales nucleares japonesas hayan resistido perfectamente un terremoto de grado nueve a pesar de su antigüedad, y que sólo la conjunción de dos fenómenos extremadamente improbables -un terremoto de esa magnitud seguido de un enorme tsunami-, unida a la ubicación geográfica de la central junto a la costa esté generando un riesgo real de catástrofe nuclear.

Las conclusiones que se extraigan del drama que está sufriendo Japón en forma de mejoras de seguridad en las próximas centrales, e incluso en las ya existentes, lejos de sepultar la alternativa nuclear con análisis superficiales, precipitados y electorales, debiera impulsarla. Pero eso no ocurrirá. Cosas de la oclocracia.


9 comentarios:

No cogé ventaja, ¡miarma! dijo...

A mi me da que es igual todo, y te doy la razón en cuanto a que a partir de ahora serán mucho más seguras, incluso, las nucleares.
Lo que no tenemos claro es, que con toda nuestra sobervia, no seamos capaces de entender lo vulnerables que somos.
Yo lo llamo Dios; otros Ala, Buda, destino, etc. cada uno como quiera, y creo que es lo que rige nuestro destino.
Mientras no tengamos esto claro y seamos más humilde nos seguiremos llevando estos sofocones.
Saludos.

José Miguel Ridao dijo...

Y que lo digas. Es una pena, pero así funcionan las cosas, y el voto es el voto, y la incultura es la incultura, y yo he tenido que buscar en el diccionario el término "oclocracia".

Un abrazo unicrático.

Er Tato dijo...

Bueno Rafael, yo soy agnóstico, pero también consciente de las limitaciones del ser humano y del poder de la naturaleza. No creo en el destino, pero sí en las consecuencias de nuestros actos.

Saludos

Er Tato dijo...

Has tenido que buscar esa palabreja porque seguramente, allá por el 2007, no frecuentabas esta taberna ;-)

Otro abrazo, poeta

ana dijo...

Lo de que la energía nuclear nos proporciona independencia energética es una falacia de libro. Que yo sepa el uranio lo tenemos que importar, y si quedan pocas décadas de petroleo, menos quedan de uranio.

A quién beneficia este tipo de energía que tantos defensores tiene? Es que se desconoce el descomunal gasto del estado en subvenciones a esta energía para que sea rentable (a unos pocos)?

Lo de la energía tiene difícil solución.

Er Tato dijo...

Bueno Ana, como suele decirse, la ciencia avanza que es una barbaridad. EL uranio que se usa en la mayoría de las centrales actuales es el isótopo 235, pero existen ya los llamados reactores rápidos que utilizan otros elementos como el torio o el uranio 238, mucho más abundantes. También existe ya tecnología para extraer uranio de los océanos, donde hay grandes cantidades. También es posible reutilizar combustible generado en el propio reactor. En fin, que me temo que no es precisamente la escasez de combustible susceptible de generar energía nuclear el problema, Ana.

Saludos

Anónimo dijo...

Me asustan las personas como tú, tan juiciosas, tan racionales, tan pragmáticas, tan ordenadas mentalmente; que sólo temen el desorden de la muchedunmbre.
Me dan miedo los que como tú están convencidos de que la energía nuclear es un riesgo controlado y que se beneficio es superior al riesgo, o que las costas son edificables; o que las personas son niveles de productividad; o que la Naturaleza agresiva es una casualidad; o que nacieron inteligentes; o que se hicieron solos; o que cada uno tiene lo que merece;, o que no está locos.

Er Tato dijo...

¡Halaaaaa, exagerao....!

cibeles dijo...

Nuestra realidad es que Francia tiene unas 58 centrales nucleares, si ocurriera un "accidente" ¿alguien piensa que no nos afectaria?. Mientras tanto están generando una energia mas barata que la que se puede obtener por energias renovables (a dia de hoy) y donde mas se nota ese diferencial es en el tejido industrial sobre todo en tiempos de crisis. Resumiendo compartimos el riesgo pero no sus beneficios.
Saludos