martes, 22 de junio de 2010

A ver quién se cansa antes

"Los mercados no acaban de tener confianza total en nosotros. Nosotros tampoco nos fiamos de ellos. En ese aspecto, las cosas están equilibradas. Pero ellos tienen el dinero y a nosotros nos falta, como consecuencia de su lujuria y avaricia. Cuando ellos, los mercados, nos exigen sacrificios, no están hablando de ellos; están hablando de nosotros. Los ricos no piden medidas de ajuste estructurales para los ricos; las piden para los que no lo somos." (Rodríguez Ibarra, El País)

No me cansaré de repetirlo tantas veces como la demagogia y la ignorancia militante insista en mostrar la lujuria y la avaricia de los mercados -imagino que se refiere a los financieros-, como causa de nuestros males. Porque ha sido nuestra lujuria y nuestra avaricia, no la de otros, la que nos ha llevado donde ahora estamos. ¿Alguien se imagina qué capacidad de influencia tendrían esos mercados sobre nuestras decisiones políticas y económicas si nuestro nivel de endeudamiento total estuviera en torno a la mitad del PIB en lugar de suponer casi cuatro veces aquél? ¿O si los gobiernos, que son quienes deciden la cantidad de dinero en circulación y fijan las reglas de juego, no hubiesen inundado de dinero barato los mercados y mirado para otro lado mientras los balances de algunas instituciones financieras se llenaban de mierda? ¿O si durante las dos últimas décadas nos hubiésemos dedicado a construir una economía basada en el esfuerzo y el capital humano? Han acertado: ninguna. ¿Entonces?


4 comentarios:

mujer prevenida vale por dos dijo...

lujuria, avaricia, sacrificio...
y yo pensaba que la economía era aburrida...


(Puen en confianza Tato cuando yo veía como todos se endeudaban para 30 o 40 años... y yo pensaba de otra manera me llamaban loca
cuando conducía y conduzco un coche que tenía mas años que yo y llevo otro que es imposible que se devalue más por lo que deduzco ingenuamente que cada año que pasa y no lo cambio gano dinero... me llaman loca, y roñosa!)

A la gente le enseña a hacer las cuentas el director de la sucursal de su calle, jajaja y ahora se quejan!

Y yo pienso no tendrá nada que ver que la gente tome antidepresivos subencionados y firmen tan alegremente sentencias de muerte...

Yo me quedo aquí que aprendo mucho! y pienso!
Tienes red-bull? ya se que sois más finos... pero si no tienes vete pidiendo que tienes parroquiana para rato.
ciao

Er Tato dijo...

¿Aburrida la economía? Sólo para los que tienen mucha pasta. A los pobres sólo nos queda la economía y el sexo. Y éste último, a ser posible, que no sea del todo a 100. Para algo que es gratis... Ya lo dijo Woody, el sexo sólo es sucio si se hace bien.

¿Red-bull? Aquí no ponemos esas mariconadas, guapetona. ¿Que somos finos? Eso es que no conoces al personal de la taberna (el Letri, el Dientoro, el Manteca, Sven el pichita, Pepe el Papa...). Te pongo mejor un vermú fresquito con sifón, que también te da alas.

Besos

Panduro dijo...

Ni del mercado, ni del gobierno, ni de la sociedad, ni ná de ná. La culpa fué del cha cha cha

O mía, vete a saber.

Er Tato dijo...

Qué grande Gabinete Caligari, Panduro. Mejor pongo la música, sirvo unas copitas y a la crisis que le den.

Saludos