Con dos cojones. ¡Sí señor! Un aplauso para el señor Solbes. "No se debe impedir artificialmente el ajuste del sector de la construcción", ha dicho el tío. Y mucho menos con nuestros impuestos, añado yo. La única duda es si cumplirá lo que ha dicho. De momento, la teoría se la sabe. No estaría de más que aplicara esa receta a nuestra economía con algo más de generosidad. Seguro que como son socialistas no les llamarán liberales de mierda.
Y con otros dos cojones. Al presidente de los promotores, esos que llevan más de una década forrándose, le ha sentado como una patada en los ídem que el gobierno no esté dispuesto a socializar las pérdidas. Hasta tal punto, que ha perdido el sentido del ridículo. Ha dicho, entre otras sandeces, "yo no he pedido ayudas para el sector y no las pediré nunca, porque cada uno debe aguantar sus responsabilidades. Las pido para los compradores". ¿Desde cuando una subvención a la demanda no es una ayuda al sector correspondiente? Como me cuesta creer que un señor que preside una organización de ese tipo ande tan pez en economía, no termino de entender cómo ha sido capaz de decir las cosas que ha dicho. Claro, que también puede ser que la explicación estribe en que yo deba ser algo más crédulo.
1 comentario:
fijate que yo soy de letras puras... pero hasta yo te entiendo... pues no son listos ni nada...
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