lunes, 24 de marzo de 2008

Riesgo moral

Aunque el título no lo sugiera, de lo que voy a hablar es de economía. ¿A dónde van? ¡No salgan corriendo, por favor!

En economía, la expresión "riesgo moral" hace referencia a la tendencia que tenemos las personas de asumir más riesgos de los razonables cuando se tiene un seguro que cubre los mismos. Paradójicamente, esta circunstancia aumenta la probabilidad de que el hecho asegurado termine ocurriendo. Quien tiene asegurado su coche a todo riesgo conducirá de manera más imprudente. Quien tiene su vivienda asegurada pondrá menos atención en cerrar grifos o puertas, instalar rejas o contratar una alarma.

En el mundo empresarial, cuando los trabajadores sienten blindados sus puestos de trabajo (funcionarios, industrias subsidiadas, amplia protección por desempleo, altas indemnizaciones por despido...), no se preocupan demasiado de ser competitivos o de formarse. Y los empresarios seguros de que el Estado acudirá en su ayuda ante una crisis, asumirán riesgos excesivos y gestionarán mal sus empresas.

Cuando los gobiernos intervienen en la economía, más allá de la recaudación de impuestos y una determinada redistribución de la renta, están incrementando el riesgo moral. Si una empresa no es rentable o ha estado mal gestionada generando pérdidas que la hacen inviable, comprar su continuidad con los impuestos de los ciudadanos es una inmoralidad. Se transmite al mercado que no es necesario ser racional y prudente. Se elevan los incentivos para asumir riesgos excesivos. Se socializan las pérdidas y se privatizan los beneficios.

Viene todo esto a cuento de lo que está sucediendo en el sistema financiero internacional en general, y en el estadounidense en particular. Resulta que en el país teóricamente más liberal del mundo, se plantean recurrir al dinero público para rescatar a su sistema financiero y a los ciudadanos que no pueden pagar su hipoteca. El origen de la crisis ha sido el excesivo riesgo tomado por prestamistas y prestatarios. Si se produce un rescate empleando el dinero de todos ¿qué mensaje se le traslada al que fue prudente y decidió no vivir por encima de sus posibilidades?

Sin duda, la quiebra de bancos afectaría gravemente a la economía mundial y a la confianza en el sistema financiero a medio plazo, pero lanzaría una señal contundente. Salvarlos de la quiebra empujaría a los que hasta ahora han sido prudentes a dejar de serlo e incrementaría la temeridad de los que ya lo eran. Atentos pues a la jugada de los próximos meses cuando a la desaceleración en nuestro país se la pueda empezar a llamar crisis sin que le acusen a uno de antipatriota. Siempre con la venia de Zapatero, por supuesto.


1 comentario:

Juan Carlos Garrido dijo...

Lo cierto es que me tiamblasn las piernas con sólo pensar lo que se les pueda ocurrir. Mejor, no darles ideas.

Saludos.