viernes, 21 de agosto de 2009

Causalidades

"La patronal catalana de las micro, pequeñas y medianas empresas y los autónomos de Cataluña", como ellos mismos se definen, ha realizado un interesentísimo estudio sobre la distribución del personal al servicio de las Administraciones Públicas. Vamos, de aquéllos a los que pagamos el salario con nuestros impuestos. Y con los suyos, claro.

Sólo son cuarenta y cinco páginas, pero con letra hermosa, muchos dibujitos y muchos colorines. Anden, no me sean vagos y léanse al menos las tres páginas -de la cinco a la siete, ambas inclusive-, del resumen ejecutivo. ¿No se las quieren leer? Bueno, vale, les haré un resumen del resumen. Pero después no me acusen de demagogo.

En el conjunto del Estado, excluida Cataluña, el 14,71% del total de asalariados lo son de la Administración Pública. En Cataluña, el 9,26%.

El porcentaje medio en el periodo 2004-2009 de empleados públicos sobre el empleo de la propia Comunidad es del 23,3% en Extremadura, del 15,6% en Andalucía y del 8,3% en Cataluña.

Y finalmente, por si alguien piensa que el factor población o tasa de paro -por aquello de que en los datos del párrafo anterior andan camuflados en el denominador-, puede arrojar una foto interesada, añadiré que la ratio media de empleados públicos por cada 1.000 habitantes en el periodo analizado es de 82,8 en Extremadura, de 58,4 en Andalucía y de 38,1 en Cataluña.

¿Es casualidad que Cataluña sea de las regiones más dinámicas y ricas del Estado, y que Extremadura y Andalucía anden siempre reptando entre rastrojos a ras de suelo? Aliñen los datos anteriores con algunos otros, como la cultura de las subvenciones o los modelos y colores de los gobiernos existentes en cada caso desde que se instauró la democracia en nuestro país, y si siguen creyendo en las casualidades, es que son ustedes unos benditos. Además de cómplices de la situación, claro.


12 comentarios:

mangeles dijo...

No sé si he entendido bien. Pero creo que a mayor intervención del Estado en el empleo, menos riqueza.

Si es eso,...estoy de acuerdo contigo. Extremadura y Andalucía, son Comunidades con un potencial humano, cultural y en producción agrícola, etc...que no deben aceptar los "subsidios"...

Creo que ambos casos, en Extremadura por su riqueza de espacios naturales, y en Andalucía, por la cantidad de jubilados y personas con pensiones, que por su clima y forma de vida, se van a vivir allí, se están viendo perjudicadas en su crecimmiento económico...pero no tengo ni idea de como pueden arreglarlo.


Un beso Tato...y ponme una cañita fresca anda...

Yo con una pensión pequeñita, también me iría a vivir a cualquier parte de Andalucía, Cádiz, Málaga, Granada, uffff ...compréndelo amigo...esa tierra es mucha tierra. (A Sevilla ni loca...con 40 a la sombra ...uff...)

Anónimo dijo...

Deprimente

mangeles dijo...

Por cierto, voy a ver los votos del PSOE en Cataluña y en Andalucía las dos últimas votaciones generales...a ver que sale...porque yo tenía la idea de que habían ganado por el voto catalan.

Más besos

Anónimo dijo...

Que se puede esperar de un liberal de izquierdas.....

mangeles dijo...

En el 2.008, el PSOE consiguió en andalucía el 57% de los escaños en juego(61), en Cataluña el 53% (47) y en Madrid el 42% (35)...No hay tanta diferencia entre el voto en Andalucía y el de Cataluña...máxime teniendo en cuenta, que en Andalucía no hay un gran partido nacionalista...¡Digo yo...¡

Más besos, Tato

Er Tato dijo...

Bueno Mangeles, yo me refería a los gobiernos autonómicos desde la transición. Y ahí va esa cañita fresquita.

Pues sí, Parsimonia, que después de casi treinta años de subsidio estemos como estamos dice muy poco de nosotros, los andaluces. Y de los extremeños.

Besos tristes, que se me acabaron las vacaciones

mangeles dijo...

Yo creo que esa idea de subsidio es tan falsa, como que Cataluña tiene 3 veces mejor calidad de vida....La última ciudad andaluza donde estuve fué en Córdoba...y es brillante, hermosa, cultural, con una calidad de vida estupenda....

Y en Extremadura, solo he estado en pueblos pequeños, en el Valle del Jerte, y la gente vive bien, pone sus negocios, mandan a los hijos a la universidad, y todos mantienen las raices con su tierra...

Tengo amigos que han invertido sus ahorros en su tierra, Cordoba o Cáceres.

Vamos, no seais pesimistas, y no creais que oro todo lo que reluce...Madrid...oh Madrid...cuanta fachada y que poco cimiento.

Besotes

Karol_a dijo...

Pues yo estoy contigo Mangeles. Tato esta vez, no sé yo eh...
:)

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Más que deprimente es cojonudo.

Er Tato dijo...

¿Cojonudo, Javier? A veces no termino de pillar tu sentido del humor.

Un abrazo

Er Tato dijo...

Vaya por delante, mis queridas Mangeles y Karol_a, que mi calidad de vida en Andalucía es cojonuda y no la cambio por nada. Es más, rechacé en dos ocasiones un importante ascenso profesional por no irme a Madrid. Pero ni yo, ni los que tienen mi suerte son, por desgracia, la referencia del nivel de vida en Andalucía.

Quizás si le preguntáis a los 400.000 parados que hay más en Andalucía (25,4% de paro, 1 millón en total) que en Cataluña (15,88% de paro). O a los trabajadores andaluces, con ingresos medios un 20% inferiores a los catalanes (17.000 vs 21.000 según los últimos datos del INE de 2006). O a los alumnos, con más fracaso escolar que en Cataluña. En fin, ésta es sólo una muestra, pero en el INE y en sangoogle tenéis más.

Que el nivel de vida no es la pandereta, el sol y la gastronomía, amigas mías. Que el metro para medir no está en los que vivimos bien, sino en los que medio viven o se desviven para vivir. Y esos no están en los restaurantes ni en los hoteles que se llenan todos los veranos.

Agradezco la buena intención de tu comentario, Mangeles, pero los andaluces no deberíamos seguir mirándonos el ombligo por más tiempo. Hay demasiado en juego.

Besos enormes, guapetonas

mangeles dijo...

Bien, acepto que nada mejor que la autocrítica para salir de los problemas.

¡Pero, que quede claro que soy 1.000 Eurista, y en Córdoba fui a los restaurantes y lugares donde van todos los turistas de poca monta¡

Eso sí...nos dimos una vuelta en coche caballo por la ciudad, como auténticas guiris.

Besos, Tato