miércoles, 6 de mayo de 2009

Disimulando. O no.

No tengo vocación de aguafiestas, pero en esto de la gestión de los asuntos de todos -de la política, para que nos entendamos-, conviene tener la vista pegada a la realidad lo más posible porque, de no ser así, las decisiones que se toman suelen tener poco que ver con los problemas que pretenden solucionar.

A la euforia contenida con la que algunos ya vislumbran la luz al final del túnel enarbolando los datos del paro del mes de Abril -aún no sabemos si esa luz son realmente los faros del trailer suicida que viene por nuestro carril-, habría que contraponer los datos del propio Miniterio de Economía que, en la página 3-26 de su informe de Síntesis de Indicadores Económicos, nos muestra los datos de paro desestacionalizados. Para quien no lo sepa, en cualquier ciencia social en la que se haga uso de la estadística como instrumento de análisis es muy común el empleo de los llamados datos desestacionalizados, que nos ofrecen una perspectiva más amplia y adecuada de las magnitudes a estudiar. Desestacionalizar implica limpiar de efectos coyunturales los datos para que aflore la tendencia real de los mismos.

Así, en el informe mencionado, la columna denominada Original muestra los datos brutos, los que publica el INEM todos los meses y emplea el gobierno en sus ruedas de prensa, y la columna CVE (Corregida de Variaciones Estacionales) los datos desestacionalizados. Puede apreciarse en éstos últimos cómo el paro subió en Febrero en 147.000 personas (154.100 en datos brutos), en Marzo en 157.900 personas (123.500 en datos brutos) y en Abril en 118.200 personas (39.500 en datos brutos). Si tenemos en cuenta además que Abril, y probablemente los próximos dos o tres meses, recoge el efecto de la creación de los puestos de trabajo de quita y pon correspondientes al famoso Plan E -efecto que no está corregido por la destacionalización-, los datos lanzan un mensaje muy claro: aún no hemos tocado fondo. Y lo que es peor, quienes deben tomar decisiones rápidas y valientes andan tremendamente despistados. O se lo hacen.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Están despistados y se lo hacen por la cuenta que les trae. Esto lo deberían saber más que de sobras, amigo Tato, y hacernos ver que no es una necedad. Nos siguen considerando tontos. Un abrazo.

JUANAN URKIJO dijo...

Está claro que aún no hemos tocado fondo y es muy interesante, en ese sentido, tu aportación sobre los datos del desempleo desetacionalizados. Lo que no tengo ya tan claro es que la gente quiera saber la verdad... y, a veces, pienso que no les importa demasiado, viendo cómo están las cosas, dejarse engañar siquiera un poco. Quizá por soñar...

Un abrazo, Tato.

Er Tato dijo...

¿Nos siguen considerando tontos sin razón, amigo Octavio?

Amigo Juanan, me alegra verte por aquí. A veces es conveniente abrir mucho los ojos, de par en par, y abrochar los párpados a la frente para poder soñar tranquilos después. Y por cierto, enhorabuena por tu primera novela.

Un abrazo fuerte. Bueno, uno para cada uno.