martes, 23 de octubre de 2007

El primo de Rajoy

El juego de palabras estaba a huevo, así que mérito ninguno. Pues eso, que se nota que Rajoy es de letras puras. Aunque me preocupa más lo del primo. Si es profesor de Física y no cree en la estadística como instrumento de la ciencia, mal vamos.

Y que conste que sobre esto del cambio climático soy bastante escéptico. Hay científicos serios en ambos bandos. El origen de mi escepticismo no sólo es ése, sino la facilidad con la que se está utilizando políticamente esta cuestión. Y si no, que se lo pregunten al primo de Rajoy. O a su primo. O a Zapatero. O a Llamazares y sus duendecillos verdes.


5 comentarios:

Reyes dijo...

Le llamaremos para pedirle la predicción del tiempo en Semana santa...

Ludwig Constantine dijo...

A ver, el cambio climático es un hecho, lo que es discutible es si los humanos tenemos algo que ver en ello. Mi opinión es que sí, y la mayoría de científicos no interesados parece que piensan lo mismo.

No es que yo sea un ecologista radical, pero hay muchas cosas que cuestan poco y se pueden hacer para mejorar la situación.

Er Tato dijo...

Mi querido Ludwing, me alegra saber que das por hecho la existencia del cambio climático. Y me alegra porque no sabes lo que es vivir en esta incertidumbre....

Como decía mi abuelo, yo no digo ni que sí ni que no, sino que si quieres que te cuente el cuento de la buena pipa. Por ejemplo ¿quién te dice que lo que está sucediendo no forma parte de un proceso cíclico cuya amplitud de ciclo abarque miles de años y nos encontremos ahora en la parte ascendente de un semiciclo? Aunque seas de letras, recordarás lo que es una sinusoide y la frecuencia o el periodo de una función circular.... Sólo era un ejemplo.

Y fíjate, que el hombre pueda tener que ver con los cambios que se producen, me parece lo menos discutible. Otra cosa es que el efecto del hombre sea el que provoque efectos tan apocalípticos e inquietantes. Oye, por curiosidad ¿ a qué mayoría de científicos te refieres? ¿Y en qué se supone que no están interesados estos? ¿y en qué están interesados los otros, los que según tú no son mayoría?

El caso es que yo quiero creer, pero no me sale..... Este escepticismo, que es un sinvivir.

En lo de que se pueden hacer muchas cosas que cuestan poco, absolutamente de acuerdo.

¡Ah! Y enhorabuena por tu alterblog. A ver si a éste lo cuidas mejor y le das de comer más a menudo.

Saludos

P.D.: Más que nada por equilibrar la balanza y tener otros puntos de vista, que siempre son sanos:

El ecologista escéptico versiona el calentamiento global

Bjorn Lomborg

Un premio Nobel de la paz inadecuado

Guía políticamente incorrecta del calentamiento global

Er Tato dijo...

Para los que no se sientan cómodos en la lengua de Al Gore, perdón, de Shakespeare, aquí va uno de los enlaces anteriores traducido.

Un premio Nobel de la Paz inadecuado

Perdón por poner el enlace en inglés. No me percaté de que tenía una versión en castellano.

Saludos

Anónimo dijo...

Por un lado el primo de Rajoy ha desperdiciado una magnífica ocasión para quedarse callado.

Pero por otro lado el tío Al. Yo a este sujeto lo tengo calado desde hace varios lustros. Cuando este tipo era senador de los EEU y U (Borat dixit) aprovechó su posición para darle vidilla a una asociación, el PMRC, formada por su esposa Tipper y otras aburridas "señoras de" que promulgaba que el rock era pernicioso para la juventud y promulgaba la censura en los discos o al menos que estos tuvieran una advertencia: la famosa pegatina "PARENTAL ADVISORY - EXPLICIT LYRICS".
Ni que decir tiene que el tiro les salió por la culata y en vez de frenar las ventas de tales discos, la dichosa pegatina era para los jóvenes como la miel para las moscas. Decirle a los jóvenes: "¡No escucheis este disco! Está lleno de palabras malsonantes y de sexo explícito" es toda una invitación a comprarlo.

Ahora va de ecologista, eso sí cobrando 200.000 euros por conferencia. Claro que si a mí me pagaran dicha cantidad sería capaz de disertar y demostrar que la tierra es cuadrada.

No sé donde lo leí, pero la frase tiene más razón que un santo: "Que se callen los políticos y que dejen a los científicos discutir sobre el cambio climático".