martes, 1 de noviembre de 2011

¡Y que salga el sol por Antequera...!

Debo reconocer que en la cuestión del referéndum griego no lo tengo nada claro.

Por un lado, nadie debiera tener dudas sobre la bondad de preguntar al pueblo, que al fin y al cabo es quien asumiría las consecuencias de su decisión, sobre si desea ser rescatado por Europa y, sobre todo, asumir las condiciones impuestas para ello.

Por otro lado, resulta inevitable tener esas dudas, en la medida en que el no es ciertamente probable. Un no decidido, posiblemente, desde la incapacidad de comprender el alcance de la respuesta, desde la inevitable superficialidad de una simple pregunta, desde las tripas de una indignación acrítica.

Con todo, uno se inclina por consultar al pueblo.


6 comentarios:

Castizo dijo...

Lo peligroso es que el pueblo piensa siempre que más vale pan para hoy, que hambre para mañana, lo que traducido a términos financieros es que el pueblo tiene una peligrosa proclividad a las políticas inflacionistas y de control de cambios. Lo de la unidad monetaria pilla lejos.

Er Tato dijo...

Antes de nada, Castizo, bienvenido a la taberna, y a la primera, como ya es costumbre, invita la casa.

En cuanto a tu comentario, ya digo al principio de la entrada que no lo tengo nada claro. Y el título de la entrada también es bastante gráfico. A veces, quizás por un cierto y absurdo miedo a ser considerados poco demócratas, tendemos a pensar que lo democrático es consultar siempre al pueblo y que la opinión de la mayoría siempre es digna de respeto y de tenerse en consideración. Nuestra Constitución, por ejemplo, lo tiene claro cuando veta en su art. 87.3 a la iniciativa popular la posibilidad de impulsar proposiciones de ley en materia tributaria. ¿Alguien se imagina que el pueblo pudiera decidir cuánto paga al fisco? ¿Y a alguien se le ocurre tachar a los padres de la Constitución de poco demócratas?

En fin, que a pesar de la frase final de la entrada, sigo sin tener claro si es una buena idea el referéndum.

Saludos

Panduro dijo...

Pues nada, ahora que lo alemanes hagan otro referéndum para decidir si ponen el dinero para rescatar a Grecia y verás qué risas.

Zapateiro dijo...

El referéndum llega tarde, está protituido y lo veo hasta peligroso.

Lo que pone de manifiesto de una forma pavorosa es la completa ineptitud de los dirigentes políticos que los -nos- gobiernan. Y veremos a ver si sale el sol por Antequera.

Er Tato dijo...

Sí, Panduro, risas para no llorar...

Er Tato dijo...

A lo mejor tienes razón y sí que llega tarde, Zapateiro. Quizás debieran haberle preguntado al pueblo griego cuando ataban los perros con longanizas, el fraude fiscal y la corrupción estaban a la orden del día y falsificaban las cuentas del Estado, si estaban de acuerdo con todo aquello. Porque de aquellos polvos...

Y claro que sale el sol por Antequera, guapa. El sol siempre sale.

Besos