Pues poco han tardado. Resulta que Joan Herrera, diputado de ICV en el Congreso, va a registrar el próximo lunes en la Cámara Baja una proposición no de ley, en la que insta al gobierno a liderar una iniciativa europea para la limitación de los sueldos de los deportistas profesionales. Y claro, si se trata de ser el primero en dar la nota, seguro que Zapatero se va a Bruselas a las primeras de cambio.
También le va a preguntar al gobierno si piensa acometer alguna reforma al respecto y qué opinión le merecen las entidades financieras que han facilitado el crédito para la operación de Cristiano Ronaldo.
Debe ser tremendamente importante prohibir que cada cual negocie su salario libremente, o conocer la opinión de nuestro presidente al respecto en sede parlamentaria, sobre todo con la que está cayendo, pero no termino yo de cogerle la gracia al asunto. Nivelazo el de nuestro Parlamento.
8 comentarios:
Pues ese señor futbolista, con el dineralazo que gana, creará riqueza y trabajo, comprará yates, alquilará chicas, vivirá a todo tren y eso le da a la gente mucho dinero. Además, puede que sea incluso generoso y dé dinero para obras de beneficiencia. Así que el Parlamento, si aprueba la proposición, tiene más prejuicios que... no se me ocurre una comparación. Un abrazo.
Totalmente de acuerdo contigo y con el comentario de Jesús. El capitalismo es así, les guste o no. Da igual que cobre eso un futbolista o un alto directivo, los dos generan riqueza. Otra cosa es lo mal que está distribuida esa riqueza, pero ya se sabe que eso es el gran fallo de la economía de mercado. Menos mal que tenemos a Sosoman para solucionar los problemas que los economistas no logran resover.
Un abrazo, Tato.
¿No se te ocurre una comparación, Jesús? No me lo creo ;-P
¿La desigual distribución de la riqueza es el gran fallo de la economía de mercado? ¡Ay, señor Ridao, que le chorrea el keynesianismo por las comisuras. En cualquier caso es un buen asunto de debate. ¿Es la economía de mercado la que crea las desigualdades de renta, o son las circunstancias previas de cada individuo, tanto las elecciones individuales que dependen de él como sus circunstancias no elegibles, las que permiten a cada cual obtener un determinado nivel de renta? ¿Y es el libre mercado el responsable de la capacidad de cada individuo para generar riqueza, y por tanto rentas para sí mismo? Tengo más, pero de momento me quedo ahí.
Un par, o dos, de abrazos.
Buen debate ése, amigo liberalista, en cualquier caso no negarás que el mercado es injusto, entendiendo por injusticia que las circunstancias no elegibles de una persona la suman en la miseria.
Podríamos hacer dos entradas simultáneas sobre el tema, tú defendiendo una postura y yo otra, y animando a los comentaristas a dar caña al rival. A lo mejor así tenemos más poder de convocatoria en una entrada sobre economía.
Abrazos.
Hecho, amigo José Miguel. Ahora ando un poco liado, pero antes de este Domingo está. Si quieres las sincronizamos, no vaya a ser que leas primero la mía, te quedes sin argumentos para la tuya y quieras cambiar de chaqueta. ;-P
Y por cierto, como adelanto, ya te matizo que el mercado, el libre mercado, siempre es justo y que desde luego no es su función tener en cuenta las circunstancias no elegibles de las personas.
Un abrazo
¿Te parece que las dejemos programadas para el lunes que viene a las 7:30 de la mañana? Si te parece enlazamos el blog rival, para crear polémica. La tuya se puede llamar "Argumentos a favor del liberalismo" y la mía "Argumentos a favor del keynesianismo"
Me parece bien lo de programar la entrada y enlazarnos -pero que corra el aire y sin mariconeos, ¿eh?-, aunque deberíamos concretar algo más el debate. Con ese título podemos escribir cada uno un tocho infumable. Déjame que le dé una vuelta a la forma de ceñirnos un poco más a algún aspecto concreto más relacionado con los comentarios que han suscitado la polémica y más a pie de calle, más didáctico. Si te parece, rematamos el asunto por email para no aburrir al personal.
Un abrazo
De acuerdo, concretamos detalles por e-mail. Abrazos.
Publicar un comentario