viernes, 15 de junio de 2007

El rey del mambo y sus maracas

De todos los que copean por esta taberna es conocida mi postura respecto de la nueva asignatura de Educación para la Ciudadanía. Si se limitara a explicar el funcionamiento de las instituciones democráticas de nuestro país o a ofrecer unas nociones básicas de Derecho, seguramente nos haría mejores ciudadanos. Como expele cierto tufo a pensamiento único y acrítico, pues me huele mal.

Dicho esto, me hace mucha gracia si no fuera patética, la postura de la Iglesia. Aunque podría elegir cualquier declaración de las que ha hecho sobre este asunto, me voy a decidir por una de las últimas que he leído del obispo de Córdoba. Dice este buen señor lo siguiente:

"La formación de la conciencia moral no es competencia del Estado, que no puede imponer a los niños y jóvenes un sistema moral determinado"

"....como materia obligatoria, conculca el derecho primordial de los padres a determinar el tipo de formación religiosa y moral que desean para sus hijos, derecho amparado por la Constitución Española"

"Esta Educación para la Ciudadanía es inaceptable en la forma y en el fondo. En la forma, porque impone legalmente a todos una antropología que sólo algunos comparten y, en el fondo, porque sus contenidos son perjudiciales para el desarrollo integral de la persona"

Estoy básicamente de acuerdo con el obispo. Lo que me abruma es la extraordinaria capacidad de la Iglesia para afirmar lo uno y lo contrario, sucesiva o simultáneamente.

Cuando el gobierno, hace ya bastantes años, suprimió la obligatoriedad de cursar la asignatura de religión, la Iglesia y las organizaciones católicas se echaron las manos a la cabeza y no han parado de despotricar contra aquella decisión. ¿Es compatible esa actitud con los argumentos que usan ahora contra la asignatura de Educación para la Ciudadanía? Una de tres: o eran inmorales, mentirosos y manipuladores entonces, o lo son ahora, o han cambiado de opinión.

Tras comprobar que la decisión de declarar la asignatura como voluntaria era inamovible, exigieron que al menos su oferta fuera obligatoria para los centros educativos públicos. Y lo consiguieron. De esta forma, impusieron a quienes no elegían la asignatura de religión la pérdida de horas lectivas en asignaturas sustitutivas sin sentido. Eso cuando existían, porque a mis hijos los sacaban de clase y los dejaban sólos en un aula vacía. Pero seamos bien pensados y admitamos las tres alternativas anteriores como posible explicación de la exigencia al Estado de la "......formación de la conciencia moral".

Ahora se le ocurre al gobierno imponer una asignatura sospechosa de adoctrinamiento. Y ahora sí que, a la vista de lo que dice la Iglesia, han cambiado de opinión. "La formación de la conciencia moral no es competencia del Estado", dicen, entre otras cosas. Si ahora no renuncian a que el Estado tenga que ofrecer obligatoriamente la asignatura de religión, a que ésta se imparta en horario lectivo y no en el tiempo libre de cada cual, las tres alternativas quedan reducidas a dos. Probablemente de forma simultánea. Y ninguna de las dos deja en buen lugar a la Iglesia.

Resulta obsceno que al rey del mambo le moleste el sonido de las maracas.


8 comentarios:

convidado con el rostro de piedra dijo...

Completamente de acuerdo. Yo espero (deseo más bien, porque no confío) que el Gobierno de ZP (que no es Zipi y Zape, aunque lo parezca en ocasiones) haga aún algo bien, y en la línea de su tan cacareado laicismo elimine de un plumazo la asignatura de religión de la enseñanza obligatoria.

El proselitismo, que cada cual lo realice en su iglesia, sinagoga, mezquita o sede de partido que sea.

Una duda tengo. ¿Cómo pueden tener la osadía de pretender educar para la ciudadanía quienes han demostrado no tener la más mínima educación ciudadana? Por ejemplo, hurtando la posibilidad de formar gobiernos a las candidaturas más votadas. ¿Es eso lo que van a enseñar en la nueva asignatura? Si es así, lo dicho: que cada cual haga proselitismo en su casa.

Un saludo

convidado con el rostro de piedra dijo...

aclaración: cuando digo obligatoria, me refiero a pública y a que esté contemplada dentro de los planes de estudio aprobados por el Ministerio y las respectivas comunidades autónomas.

por si hay quisquillosos que me digan que la religión es optativa. Y tanto que lo es... Yo no creo en ninguna.

el aguaó dijo...

Yo estaría de acuerdo en una asignatura que fuese Historia de las Religiones, ya que me parecería muy interesante, por supuesto de caracter optativo. Lo demás es dejar que unos niños pierdan unas valiosas horas.

Un abrazo querido Tato

Er Tato dijo...

¡Ay, mi querido aguaó...!

Esa asignatura ya existe como alternativa a la religión. Como a principios de curso la ofertaban en su instituto y nos pareció interesante (también a mi hijo), la eligió para este curso.

¿Y en qué consiste? Pues los sacan a otra clase con un profesor que se dedica a sus cosas durante esa hora, mientras los alumnos hacen los deberes. Cuando termina la clase religión, vuelven a su aula.

Desde que la asignatura de religión es optativa, mi hijo no ha recibido ninguna de las asignaturas alternativas ofertadas a las que optó, y ya está en 3º de ESO.

Lo curioso es que la asignatura de religión nunca ha dejado de ofertarse e impartirse.

Un abrazo

el aguaó dijo...

Querido Tato, yo no creo que deba existir esa asignatura como alternativa a la religión... sino esa asignatura como optativa. Si colocan Historia de las Religiones como alternativa, siempre será eso, nunca será una asignatura como tal.
Si a esto le añadimos eso que tú dices, apaga y vámonos.

Releyendo mi comentario, me he dado cuenta que mis palabras son confusas y parecen decir que como alternativa a la Religión haya una asignatura llamada Historia de las Religiones, y yo quería decir una asignatura individual y propia, y siempre optativa, nunca obligatoria.
Discúlpame por mi torpeza explicativa.

Un fuerte abrazo.

convidado con el rostro de piedra dijo...

¿Y por qué no se imparte la Historia de las Religiones dentro de la asignatura de Historia, sin más? ¿O de Filosofía, en todo caso? ¿Por qué una Historia de las Religiones específicas?

Ya sabemos que esa Historia de las Religiones no es la misma en según qué cultura... Volveríamos a caer en el proselitismo.

el aguaó dijo...

Simplemente era una idea. Me parecía una asignatura interesante querido Convidado.

Anónimo dijo...

Me parece que es importante conocer los contenidos de la asignatura "educación para la ciudadanía" que presentó el presidente en el Congreso el 3 de julio.La edición presentada fue la de Jose Antonio Marina de la editorial SM,pero parece que habrá versiones variadas de otras editoriales.Entre las cosas que he leído el señor Marina dice:"me dan de vez en cuando ataques de megalomanía educativa que debo controlar"( sálvese quien pueda)Habla de un " gran proyecto ético" con un nuevo molde de "identidades múltiples o concéntricas: de genero,religiosas ,ideológicas,nacional y humana.Además, el Estado se reserva el derecho de decidir qué valores o qué identidades son compatibles con el gran proyecto.Insiste en que el Estado,a través del curriculo educativo debe suplantar a las familias cuando estas no transmiten de manera "eficaz" valores a los hijos.(nos van a suspender a los padres?,pero no quedábamos en que ahora no se suspende para no traumar? ¿por qué me tienen que decir cómo he de educar a mis hijos?)
Tambien dice:"las familias pueden educar a sus hijos en su religión y en su moral;pero el Estado debe encargarse de facilitar a todos nuestros jóvenes aquella educación que la sociedad considera necesaria para el desarrollo de los proyectos personales,la buena convivencia ,la justa resolución de los problemas y el progreso económico" (nos va a decir el Estado lo que está bien y lo que está mal???)
Además dice que para que el individuo sea feliz,la sociedad debe serlo antes que el(cómo se mide la felicidad de la sociedad? quien la mide,el Estado?,la sociedad por encima del individuo?)
Dice:"el buen ciudadano es el que piensa bien,tiene los sentimientos adecuados y obra rectamente" (otra vez diciendonos cómo tenemos que pensar,sentir y obrar?)
Y se podría seguir…
Hace poco que leo tu blog y no siempre ,así que no se tu postura sobre la asignatura de educación para la ciudadanía,pero si he leído tus comentarios sobre la asignatura de religión y mi opinión es que si un 80% de los padres de alumnos solicitan la asignatura de religión Católica,deben poder estudiarla debiendo ser impartida por profesores adecuados( los que sean de otras confesiones deberán solicitar lo suyo).Tambien pienso que los padres tenemos derecho a enviar a nuestros hijos a un colegio cuya enseñanza esté de acuerdo con nuestros principios y no al más cercano o al que te toque.Para ello debería haber una oferta variada y posibilidad real de mandarles a ese colegio, es decir que no tengas que pagar más (una buena idea es el cheque escolar).Pero como nuestra sociedad está en el punto que está,mientras no se pueda llegar a la libertad de enseñanza real ,cada uno tenemos que bandearnos como podemos para conseguir educar a nuestros hijos como pensamos.
La educación para la ciudadanía me parece un intento de adoctrinamiento por parte del Estado que me repele.