lunes, 30 de septiembre de 2013

No saben, no quieren aprender, orejas de burro les vamos a poner...

Estaban hablando de este problema en una tertulia de televisión y a un periodista se le ocurre decir que el asunto está mal explicado. Y él nos lo iba a explicar bien, claro. Para que nos enterásemos.

Si malo fue que aspirara a explicarnos algo que él mismo no había entendido, peor fue que los contertulios, casi todos periodistas con altas responsabilidades en sus propios medios y muchos de ellos con tendencias de izquierda, no le corrigieran ni una coma. Y se quedaron todos tan panchos, oiga.

Y es que era tan simple como haberse leído la resolución de la que hablaban -de apenas tres páginas descontado el anexo-, y haberla entendido, claro. Por ejemplo, en ella se dice lo siguiente:

"Mediante esta resolución se modifican las condiciones de financiación pública de los medicamentos, que sin tener la calificación de uso hospitalario, tienen establecidas reservas singulares en el ámbito del Sistema Nacional de Salud consistentes en limitar su dispensación a los pacientes no hospitalizados en los servicios de farmacia de los hospitales. Dichos medicamentos estaban exentos de aportación del usuario."

O sea, que la propia resolución reconoce que antes estaban exentos de aportación del usuario. También se dice esto otro:

"Conforme a lo establecido en los artículos 89.1 y 94.bis.1 de la Ley 29/2006, de 26 de julio, de garantías y uso racional de los medicamentos y productos sanitarios, se modifican las condiciones de financiación por el Sistema Nacional de Salud de los medicamentos recogidos en anexo 1 a esta resolución, quedando sometidos a aportación del usuario."

O sea, que si se modifican las condiciones de financiación, quedando a partir de la entrada en vigor de la resolución sometidos a aportación del usuario, es que antes no lo estaban. Hay más información objetiva que demuestra la desinformación de todos esos tertulianos que aspiran a informarnos, pero creo que con lo dicho es suficiente.

Ésta es sólo una muestra más de la calidad de nuestro periodismo y de la necesidad de que el ciudadano contraste lo que escucha y lee.





2 comentarios:

Anónimo dijo...

"Los periodistas de izquierdas no se enteran".
Eres un monstruo de imparcialidad. Sí señor. Pues nada sigue dando lecciones de liberalismo.
Zo pedazo...

Er Tato dijo...

¿De verdad es eso lo que has entendido de la entrada? Lo digo porque el protagonista del video es más de derechas que los grifos de agua fría...

En fin, veo que no estás haciendo los ejercicios de comprensión lectora que te mandé.

Saludos, artista