jueves, 19 de marzo de 2015

De censuras y otros infantilismos

"No estoy de acuerdo con la denominación de censura. La aceptación por parte de una institución del contenido de una exposición es algo previo. Si esto es censura, estamos censurando exposiciones todos los días, porque todos los días valoramos qué obras son apropiadas o no."

Eso ha manifestado el director del MACBA al ser preguntado si la retirada de una obra de una exposición ha sido censura, para decir a continuación que "un museo público no está para transmitir ciertos mensajes y mi sentido común me dice que las interpretaciones que se harían serían perjudiciales para la institución"

Pues decidir de manera preventiva qué mensajes debe o no transmitir un museo público se parece demasiado a la censura. Es más, yo diría que decidir qué mensajes puede o no recibir el ciudadano es el objetivo por excelencia de la censura.

Pero vamos, que también pudiera ser que este hombre y yo no hablemos el mismo idioma. Ni tengamos el mismo concepto de la libertad.

Seguro que a estas alturas ya ha visto más gente la escultura de la que la hubiera visto expuesta en la exposición. Con Franco estas cosas no pasaban. Y es que con internet, la censura ya no es lo que era...


No hay comentarios: