domingo, 31 de julio de 2011

De Leguinas y otros GALácticos

"Sería chusco si no fuera hiriente que a estos tres policías (“caso Faisán”) se les acuse de un delito de colaboración con banda armada, hecho que sólo se entiende en el campo circense (“más difícil todavía”) o en el de esa estupidez post-moderna llamada record Guiness.A mí, como a cualquier persona informada y con sentido de Estado, este asunto del faisán me parece un ataque contra el sentido común." (Joaquín Leguina, 27/7/11)

Seguramente será producto de mi alto grado de desinformación -que diría algún comentarista anónimo y habitual de la taberna-, y mi escaso sentido de Estado, pero que un juez instructor impute un delito a ciudadanos españoles -encargados, para más inri, de evitar que se cometan delitos-, en un proceso con todas las garantías -sospechosamente excesivas, por cierto-, me parece lo más cercano a un Estado de Derecho: todos, incluido el Estado, sometidos a la Ley. Y desde luego, lo hiriente no es que se les acuse de un delito, sino que existan indicios suficientes como para que un juez piense que lo hayan cometido. Para el señor Leguina, casi siempre tan esnob como superficial, eso del sentido común debe parecerle una vulgaridad.


9 comentarios:

Panduro dijo...

Y ya de camino marca el territorio de caza: estos tres policías.

Juanma dijo...

Muy fino Panduro...

¿Conoces a Leguina como novelista? Por curiosidad, yo no lo he leído.

Abrazos.

Panduro dijo...

Más que finura es desconfianza Juanma. Entre unos y otros me han hecho un desconfiado.

Un verano estuve bajando a la playa Tu nombre envenena mis sueños, pero no se decirte si al final me lo leí o no. Creo que no.

Er Tato dijo...

Es que Panduro tiene que hilar fino, Juanma. Es autónomo. ;-)

Y no, no conozco a Leguina como novelista. Aunque a la vista de lo que escribe en su blog y de lo que se le escucha en las tertulias, de imaginación anda sobrado, pero su estilo literario es un pelín chusco.

Un abrazo

Er Tato dijo...

La novela no sería para que no se volara la toalla con el levante, ¿no, Panduro?

Saludos

No cogé ventaja, ¡miarma! dijo...

Este señor es un "figura", a mi me sorprende muchísimo cuando lo escucho en las tertulias de radio.
Parece que él nunca participó en nada del PSOE
Saludos.

Er Tato dijo...

Bueno, Rafael, hay muchos como él, que han debido militar en otro PSOE. Sin ir más lejos, el propio Rubalcaba.

Saludos

Anónimo dijo...

¿Me llamabas? Perdona chico, pero en verano las interferencias son cuantiosas, y ya ves: que si el martirio a lo bestia, por su entusiasmo, de Camps, que si lo de esa caja social alicantina, en la que se prestaba a interés cero a sus "propietarios", que si te amenazo con devolver competencias, (ahora no me interesan)de algunas comunidades, en un claro desparpajo de responsabilidad democrática adulta, y chico, no paro de... Y el que faltaba, a seas tú, me recrea, me recuerda, me demuestra, me enseña, me anima a que diga lo que sepa del caso de los policías corruptos. ¿Y yo qué voy a decir, si no sé ná, si no estaba allí? Además, tu extraordinario campo de visión de todas las jugadas nacionales, internacionales, económicas, sociales, políticas,y demás, me tiene anonadado, vamos que estoy inmerso en un ataque de dislalia. Para más señas, yo diría que agudo.
Ya que no puedo hablar, insisto anonadado de tu clarividencia, voy a optar por reirme. Con tu permiso, ja,ja, ja,ja. ¿tú crees que policías con un largo historial de lucha contra el terrorismo, son en realidad simpatizantes, o infiltrados, o vaya usted a saber, de ETA? ja,ja,ja,ja,. ¿tú crees que un juez instructor es infalible? Te recuerdo la instrucción del juez Flor, en el caso Camps. JA,ja,ja,ja.
Bueno Tato, tus humoradas son cada vez, por llamarlas de alguna manera, más profundas en lo superficial, y más desgraciadas en lo sustancial.
Eres un "animal", cariñosamente, eh, cuando se trata de discenir la claridad de cualquier acontecimiento.
Un abrazo de hombre, es decir, en la ditancia

Er Tato dijo...

Sólo quería comprobar si seguías ahí. Ya veo que sí. Interesante. Y
que me sigues leyendo, a pesar de tu diarrea mental, más cercana a la dislexia que a la dislalia.

Quizás un vistazo a esto cure tu sectarismo aunque sea un par de minutos. No creo que un baño de realidad te dé para mucho más. Porque aprovechar cualquier entrada para hablar de la corrupción en el PP y obviar constantemente la del PSOE... En fin, ese ERE que ERE tiene un nombre...

Respecto del asunto que nos ocupa en la entrada -porque tu comentario se refiere a mi entrada, ¿no?-, no sé si merecerá la pena contestarte, pero lo haré aunque sólo sea por deferencia al lote de escribir que te acabas de pegar en un blog que no te interesa lo más mínimo. En cuanto a los imputados, yo estoy convencido de que no simpatizan con ETA, pero ¿he afirmado yo lo contrario en mi entrada? ¿es relevante que simpaticen o no, cuando reiterada jurisprudencia, incluida la sentencia del propio Bermúdez sobre el 11M, no exigen ese requisito para calificar el delito de colaboración con banda armada? ¿debemos ser tú -un dislálico agudo sobrevenido según confiesas-, Leguina o yo quienes decidamos si es o no relevante o si hay suficientes indicios de delito? En cuanto al juez instructor, claro que no es inflalible, ¿quizás he afirmado yo eso también en mi entrada?. Si conocieras algo de cómo funciona nuestro sistema judicial sabrías que uno de los principios que presiden el proceso penal es el principio acusatorio, según el cual, entre otras cuestiones, las fases de instrucción y de juicio oral se encomiendan a dos órganos jurisdiccionales distintos. Es decir, un juez instruye e investiga, y otro distinto juzga. También sabrías que existe un sistema de recursos, precisamente porque nadie cree en la infalibilidad de los jueces. Lo que Leguina dice - y yo critico, y tú aplaudes-, es que esos policías están por encima de cualquier ciudadano y que no deben, no ya ser condenados, sino ni siquiera ser juzgados, aunque sea para declararlos inocentes. Y lo que también dice, o más bien insinúa aunque se le entienda todo, es que ni Vera ni Barrionuevo debieron ser juzgados ni condenados. Y todo eso lo dice dándose golpes de pecho en su Estado de Derecho.

En fin, que me alegra saber que sigues ahí, al pie del cañón. Y tragándote todas y cada una de mis entradas. ¡Ánimo machote!