Preguntarle a los ciudadanos si quieren subida de impuestos y rebaja de pensiones es una pamplina. La respuesta es tan evidente. que sorprende la sorpresa que algunos han manifestado tras el no de los griegos. También sorprende lo que se le ha escuchado estos días atrás a algunos sobre que lo verdaderamente democrático era votar no. Uno siempre ha creído que lo democrático era simplemente votar. Y no siempre.
No sé qué opinarán esos puritanos de la democracia sobre el hecho de que nuestra propia Constitución prohíba, en su art. 87, la iniciativa legislativa popular en materia tributaria. ¿Se imaginan al pueblo legislando sobre cuántos impuestos quiere pagar? Pues por eso está prohibido y por eso, hacer según qué preguntas al pueblo, no es más que una patochada. Y el gobierno griego, que ha disfrazado de pureza democrática su propia ineptitud y parapetado su cobardía tras el instinto popular, lo sabe perfectamente.
Un pueblo que corre a sacar sus ahorros de los bancos, en lugar de dejarlo en ellos para que se conviertan en créditos a las empresas, para que éstas, a su vez, hagan inversiones que generen puestos de trabajo y crecimiento económico. Un pueblo que chapotea en una economía sumergida, dicen que cercana al 50% del PIB, para eludir el pago de impuestos. Un pueblo que está encantado de jubilarse cuanto antes mejor y que los que vengan detrás que arreen. Un pueblo, en fin, que se comporta de esa manera -por cierto, más o menos como todos los del sur de Europa-, no puede pretender que nos tomemos en serio eso de que el resultado del referéndum ha sido producto de un ataque de dignidad y patriotismo.
No sé qué opinarán esos puritanos de la democracia sobre el hecho de que nuestra propia Constitución prohíba, en su art. 87, la iniciativa legislativa popular en materia tributaria. ¿Se imaginan al pueblo legislando sobre cuántos impuestos quiere pagar? Pues por eso está prohibido y por eso, hacer según qué preguntas al pueblo, no es más que una patochada. Y el gobierno griego, que ha disfrazado de pureza democrática su propia ineptitud y parapetado su cobardía tras el instinto popular, lo sabe perfectamente.
Un pueblo que corre a sacar sus ahorros de los bancos, en lugar de dejarlo en ellos para que se conviertan en créditos a las empresas, para que éstas, a su vez, hagan inversiones que generen puestos de trabajo y crecimiento económico. Un pueblo que chapotea en una economía sumergida, dicen que cercana al 50% del PIB, para eludir el pago de impuestos. Un pueblo que está encantado de jubilarse cuanto antes mejor y que los que vengan detrás que arreen. Un pueblo, en fin, que se comporta de esa manera -por cierto, más o menos como todos los del sur de Europa-, no puede pretender que nos tomemos en serio eso de que el resultado del referéndum ha sido producto de un ataque de dignidad y patriotismo.
8 comentarios:
El pueblo griego tiene la culpa de sus males, el único culpable, ¡toma ya! ¡Qué razonamiento tan profundo! ¡Qué capacidad de análisis! Ni los gobiernos anteriores al actual, ni los empresarios, ni los gobiernos europeos, ni las medidas de austeridad de la Troika, ni los bancos alemanes (el verdadero poder) ... Nada, nada, ha llegado un visionario, el Sr. Tato, que lo ha visto todo clarísimo: El pueblo griego es el único culpable y además, para más inri, tiene el vicio de votar.
Está claro que tú no te sientes miembro de ningún pueblo del sur de Europa. ¡Eres tan clarividente!
Tantas horas de estudio para llegar a tanto sinsentido mental sería para tomárselo a risa, pero no suelo hacerlo de los que como tú tienen alguna minusvalía, y la tienes profundísima.
Sólo por curiosidad, ¿en qué parte de la entrada afirmo que el pueblo griego es el único culpable?
Siempre me ha llamado la atención tu enorme capacidad para tergiversar, cuando no directamente inventar, aquello que escribo. Supongo que lo haces sin querer, que quizás sea cosa de tu dislexia selectiva. O quizás sea que te viene bien para justificar tus insultos e impostar tu indignación. Aunque podrías al menos manipular con algo más de sutileza. No olvides que por aquí todos saben leer.
En fin, que me alegro de que sigas tan pendiente de lo que escribo a pesar de mi profundísima minusvalía. Y te agradezco el respeto que me muestras al no reirte de mis carencias. Uno hace lo que puede, pero te prometo seguir aplicándome en el estudio para no darte más disgustos.
Que sigas bien y no dejes los cuadernillos Rubio de comprensión lectora que te recomendé ni la medicación.
Creo, Sr. Tato, que cualquier lector imparcial interpretará lo mismo que yo, solo mencionas
"las culpas del pueblo". Ante eso, mira qué tontería, estoy convencido quién es para ti el único culpable. Por lo demás, ¡Eres tan olvidadizo, tan sectario, tan listo, tan...!
Cualquier lector imparcial... ¿como tú quizás?
Verás, la entrada no va de culpas, sino de imposturas e hipocresías del pueblo y sus gobernantes, que pretenden ahora disfrazar de dignidad, patriotismo y heroicidad el NO al referéndumun, mientras han mantenido un comportamiento históricamente indigno e insolidario con sus propios compatriotas. Sé que te cuesta entender lo que lees cuando pretendes leer lo que te gustaría que hubiera escrito, pero no te preocupes, eso se cura con mucho ejercicio de lectura comprensiva y sacudiéndose el pelo de la dehesa del agitprop.
De todas formas, si estás convencido de lo que pienso aunque nunca lo haya escrito, ¿quién soy yo para quitarte esa ilusión?. Ya sé que no servirá de nada que allá por 2010 escribiera que los ciudadanos griegos eran tan irresponsables como sus gobernantes, no los únicos irresponsables, ni que hace seis meses volviera a insistir en que Grecia estaba quebrada gracias a sus gobernantes y a sus ciudadanos, no sólo a sus ciudadanos.
Con Dios, artista
Buenas,
El pueblo -cualquier pueblo- es responsable subsidiario de los actos y políticas de sus gobernantes democráticamente elegidos.
Saludos,
En efecto, Panduro.
Pero para algunos, democracia es votar sin asumir la responsabilidad de lo que se vota. Los que suelen quejarse, y con razón, de que la democracia no consiste sólo en votar cada cuatro años, son los mismos que después hablan, sin razón, de la deuda supuestamente ilegítima que esos mismos gobernantes elegidos han generado durante esos cuatro años para pagar las pensiones, la sanidad o darles mamamdurrias y subvenciones.
Saludos
He leído tantas noticias contradictorias sobre las cuentas griegas, que, realmente, no sé qué pensar. Supongo que es una campaña de intoxicación, como se suele decir en estos casos.
Si fulanito me debe cinco euros, prefiero que me devuelva un euro cada mes a que no me devuelva ninguno.
Salu2.
Sin duda alguna, existe una campaña de intoxicación informativa, pero nada que no se pueda soslayar si uno se preocupa de ir a las fuentes.
En cuanto al ejemplo que pones, ojalá fuera tan simple. Pero resulta que el amigo que te pidió los 5 euros te dice que sí, que te devuelve ese euro cada mes, pero si le prestas otros seis euros cada cinco meses. Y claro, tú le dices que de eso nada, que como mucho le prestas 3 euros y, como sabes que es un maniroto y que ya le has perdonado cientos de euros que te debía de otros préstamos anteriores, para intentar garantizarte el cobro esta vez, le pones como condición para prestárselo que incremente sus ingresos -subir los impuestos, aunque a mí nunca me pareció el camino; liberalizar la economía para hacerla más competitiva; cambatir el fraude...-, o que reduzca los gastos -gaste menos en defensa, eleve la edad de jubilación, reduzca el tamaño del Estado, no reabra la televisión pública, etc.-, para que pueda generar ahorro con el que pagar la deuda.
Si tu amigo te dice que no piensa hacer nada de eso, que no te metas en sus asuntos y que se siene insultado con tus exigencias, ¿le seguirías prestando más dinero? Si no se lo prestas, seguramente tu amigo se arruinará y perderás los 5 euros. Si se lo prestas, perderás los 5 euros y lo que le prestes. En ese escenario, ¿le seguirías prestando dinero?
Saludos
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