lunes, 23 de junio de 2014

De donde no hay... (LXIII)

Dos perlas, ambas en la página 17 de la presentación que ha hecho el señor Montoro esta mañana sobre la rebajilla fiscal, que no reforma.

La primera, que hay que tenerla de hormigón armado para introducir la obligatoriedad de tributar en las indemnizaciones percibidas por despido y afirmar que "se beneficia en mayor medida a los trabajadores con sueldos medios y bajos". Digo yo que querrían decir que se perjudica en menor medida a los trabajadores con sueldos medios y bajos, porque beneficiar, lo que se dice beneficiar, no beneficia a absolutamente ningún trabajador, que hasta ahora ingresaban íntegra la indemnización legal que les correspondiera.

La segunda, que todas las indemnizaciones del ejemplo están mal calculadas porque han tomado el salario diario sobre un año de 360 días y no de 365 días. Así, por ejemplo, la indemnización correpondiente a un salario de 30.000 euros no son 2.750 euros, sino 2.712 euros.

Sin entrar a valorar la cuestión de fondo -a saber, que a partir de ahora las indemnizaciones por despido tributen-, la verdad es que estos errores en un documento oficial que se utiliza en una presentación a los ciudadanos a través de rueda de presna televisada es para salir corriendo del país. 

Ni en los mejores tiempos del zapaterismo...


2 comentarios:

Dyhego dijo...

¡Y se ha quedado tan pancho, el tío Montoro éste!
Nada, don Tato, me tomo un tercer cortado y así se me quita toda la "espesez" que tengo.

Er Tato dijo...

¿Otro cortado? A ver si te va a dar algo...

Saludos