"Llamo la atención de Sus Señorías, y sobre todo también respecto de las personas que se puedan sentir hoy interesadas en la administración de la cosa pública, que tras la votación se deben comprobar los votos de los Diputados que aprueben, o rechacen, o se abstienen en la moción de censura, y también se deben comprobar los votos populares que hay detrás de esos Diputados que se pronuncien por una u otra opción. Porque, como saben Sus Señorías, hay una cierta disfunción entre los votos en la Cámara y los votos populares, por una Ley Electoral injusta y discriminatoria." (Diario de Sesiones del Congreso de los Diputados)
La cita la encuentro hoy en el magnífico artículo con el que Javier Caraballo le pone el espejo del Felipe de los 80 al Felipe de hoy. Pero no, la cita no es de Felipe, sino que corresponde a la intervención de Alfonso Guerra en el pleno del 28 de Mayo de 1980 en el que se debatía y votaba la moción de censura al Gobierno de entonces, tal y como quedó recogida en el Diario de Sesiones. Allí, ante el pleno, puso en duda la representatividad de sus señorías invitándoles a hacer las cuentas sobre el respaldo en voto ciudadadano con el que contaba el voto de cada diputado. Cuestionó, sin inmutarse ni él, ni el resto de los Diputados -como pueden comprobar en el audio de su intervención-, la calidad democrática de aquella Cámara.
Resulta cuando menos curioso que, opinando lo que opinaban, los socialistas no hayan reformado el sistema electoral tras haber estado más de dos décadas en el gobierno apoyados por una Cámara que ha sido siempre el resultado de "una Ley Electoral injusta y discriminatoria". Quizás sea porque esa injusticia y discriminación de la que con razón se lamentaban, les permitió, apenas dos años después, gobernar durante mucho tiempo.
La cita la encuentro hoy en el magnífico artículo con el que Javier Caraballo le pone el espejo del Felipe de los 80 al Felipe de hoy. Pero no, la cita no es de Felipe, sino que corresponde a la intervención de Alfonso Guerra en el pleno del 28 de Mayo de 1980 en el que se debatía y votaba la moción de censura al Gobierno de entonces, tal y como quedó recogida en el Diario de Sesiones. Allí, ante el pleno, puso en duda la representatividad de sus señorías invitándoles a hacer las cuentas sobre el respaldo en voto ciudadadano con el que contaba el voto de cada diputado. Cuestionó, sin inmutarse ni él, ni el resto de los Diputados -como pueden comprobar en el audio de su intervención-, la calidad democrática de aquella Cámara.
Resulta cuando menos curioso que, opinando lo que opinaban, los socialistas no hayan reformado el sistema electoral tras haber estado más de dos décadas en el gobierno apoyados por una Cámara que ha sido siempre el resultado de "una Ley Electoral injusta y discriminatoria". Quizás sea porque esa injusticia y discriminación de la que con razón se lamentaban, les permitió, apenas dos años después, gobernar durante mucho tiempo.
2 comentarios:
Si ya está escrito, para qué escribir algo distinto que pretenda ser original: "la razón de la sinrazón que a mi razón se hace, de tal manera mi razón enflaquece..."
Abrazos.
Original es, desde luego, pero ahora que no nos lee nadie, he de confesarte que nunca he entenido esa frase del Quijote. Aunque a lo mejor se trataba de eso... ;-)
Un abrazo
Publicar un comentario